Después de mí, el diluvio

una crítica marxista a las semillas-mercancía en el capitalismo contemporáneo

Resumen

Bajo el capitalismo, las semillas se transformaron en mercancía, dotadas de valor de uso y valor. Esta metamorfosis de las semillas fue identificada por Marx, quien señaló que los germoplasmas tenderían a ingresar al proceso de producción y venderse regularmente. La predicción marxiana se confirmó notablemente en el siglo XX, con la difusión de semillas vendidas por empresas y el fuerte llamamiento propagandístico para su incorporación a la agricultura. La técnica de la hibridación permitió a las corporaciones empresariales interferir en el comportamiento de las variedades, logrando un rendimiento agronómico decreciente. Décadas más tarde, surgieron nuevas intervenciones como la transgénesis de semillas y la edición genética, resultantes de la manipulación de genes para expresar características ajenas a la constitución de los germoplasmas. La hibridación y, sobre todo, los organismos genéticamente modificados son evidencias de la subsunción real de la naturaleza al capital, manteniendo una íntima conexión con el intento de las corporaciones empresariales de controlar los códigos genéticos de los bienes naturales del planeta. Una situación que indudablemente profundiza la ruptura metabólica de la relación humana con la naturaleza. El presente artículo analisa la cuestión de las semillas-mercancía, identificando las principales contradicciones inherentes a la dominación capitalista sobre un organismo vivo tan valioso para la (re)producción de la vida humana. Se supone que las manipulaciones genéticas en las semillas son uno de los pilares de la actual crisis ecológica. Parte de las publicaciones de Marx y de autores influidos por él establecen las bases teóricas de la reflexión. Se espera que el texto contribuya a la necesaria crítica del diluvio capitalista que nos amenaza.